domingo, 28 de septiembre de 2014

TE DESEO TIEMPO

No te deseo un regalo cualquiera,
te deseo aquello que la mayoría no tiene,
te deseo tiempo, para reír y divertirte,
si lo usas adecuadamente podrás obtener de él lo que quieras.
Te deseo tiempo para tu quehacer y tu pensar, no sólo para ti mismo, sino también para dedicárselo a los demás.
Te deseo tiempo, no para apurarte y andar con prisas, sino para que siempre estés contenta.
Te deseo tiempo, no sólo para que transcurra, sino para que te quede:
tiempo para asombrarte y tiempo para tener confianza, y no sólo para que lo veas en el reloj.
Te deseo tiempo para que toques las estrellas
y tiempo para crecer, para madurar. Para ser tú.
Te deseo tiempo, para tener esperanza otra vez… y para amar,
no tiene sentido añorar.
Te deseo tiempo para que te encuentres contigo mismo,
para vivir cada día, cada hora, cada minuto como un regalo.
También te deseo tiempo para perdonar y aceptar.
Te deseo de corazón que tengas tiempo,
tiempo para la vida y para tu vida.
Poema de los Indios Americanos

jueves, 18 de septiembre de 2014

Preceptor

Hoy homenajeamos a los preceptores  que diariamente vemos transitar por las aulas y los pasillos del colegio, asistiendo a los profesores, conteniendo a los alumnos, cuidando la disciplina, manteniendo el orden… y que han sido partícipes de la vida de varias generaciones de jóvenes. Si, ellos, nuestros preceptores son los primeros que escuchan a los alumnos, los “comodines” de varias actividades, auxiliar de secretaria, expertos en tecnología, ayudantes de actos. Otras veces, están a cargo del salón por ausencia de algún profesor. Son los preceptores los que se ponen la escuela al hombro. Feliz día !!!




martes, 16 de septiembre de 2014

Día del profesor

 Hoy,  recordando la muerte de José Manuel Estrada, se conmemora el día del Profesor y, generalizando, el día de todo aquel que ha dedicado su vida a la educación. Se es profesor por variadas circunstancias, pero se es docente sólo por una razón: se cree en el futuro luchando por el presente a través de la formación de personas, en cualquier nivel en que nos desempeñemos. 

  Va más allá de un trabajo, de un título o de un cargo y tampoco se agota en la vocación. Es la elección de una forma de vida que se asume desde la labor diaria, las exigencias, la lucha, el agotamiento, la esperanza y la alegría de hacer lo que elegimos ser. Paradójicamente, la sociedad ya no valora como antes la figura del docente pero sí le exige la mejor formación de las generaciones futuras. Ante esta situación no hacemos oídos sordos y seguimos eligiendo vivir de esta manera, siendo docentes buenos, regulares o excelentes, pero dando día a día lo mejor que tenemos para contribuir a la formación integral de nuestros alumnos. No se es docente por trabajar en el ámbito educativo, lo somos porque creemos en el hombre y en la sociedad y fundamentalmente en la educación como la única herramienta para lograr transformar el mundo. Un 17 de septiembre fallecía José Manuel Estrada. Destacamos en su figura la firmeza ética, la claridad de sus ideas, el fervor para comunicarlas y sostenerlas, y las páginas escritas sobre la educación de la juventud, que constituyen fuentes fundamentales de referencias pedagógicas y de formación moral.

miércoles, 10 de septiembre de 2014

La oración de la maestra, de Gabriela Mistral

¡Señor! Tú que enseñaste, perdona que yo enseñe; que lleve el nombre de maestra, que Tú llevaste por la Tierra. 
Dame el amor único de mi escuela; que ni la quemadura de la belleza sea capaz de robarle mi ternura de todos los instantes.
Maestro, hazme perdurable el fervor y pasajero el desencanto. Arranca de mí este impuro deseo de justicia que aún me turba, la mezquina insinuación de protesta que sube de mí cuando me hieren. No me duela la incomprensión ni me entristezca el olvido de las que enseñé.
Dame el ser más madre que las madres, para poder amar y defender como ellas lo que no es carne de mis carnes. Dame que alcance a hacer de una de mis niñas mi verso perfecto y a dejarte en ella clavada mi más penetrante melodía, para cuando mis labios no canten más.
Muéstrame posible tu Evangelio en mi tiempo, para que no renuncie a la batalla de cada día y de cada hora por él.
Pon en mi escuela democrática el resplandor que se cernía sobre tu corro de niños descalzos.
Hazme fuerte, aun en mi desvalimiento de mujer, y de mujer pobre; hazme despreciadora de todo poder que no sea puro, de toda presión que no sea la de tu voluntad ardiente sobre mi vida.
¡Amigo, acompáñame! ¡Sostenme! Muchas veces no tendré sino a Ti a mi lado. Cuando mi doctrina sea más casta y más quemante mi verdad, me quedaré sin los mundanos; pero Tú me oprimirás entonces contra tu corazón, el que supo harto de soledad y desamparo. Yo no buscaré sino en tu mirada la dulzura de las aprobaciones.
Dame sencillez y dame profundidad; líbrame de ser complicada o banal en mi lección cotidiana.
Dame el levantar los ojos de mi pecho con heridas, al entrar cada mañana a mi escuela. Que no lleve a mi mesa de trabajo mis pequeños afanes materiales, mis mezquinos dolores de cada hora.
Aligérame la mano en el castigo y suavízamela más en la caricia. ¡Reprenda con dolor, para saber que he corregido amando!
Haz que haga de espíritu mi escuela de ladrillos. Le envuelva la llamarada de mi entusiasmo su atrio pobre, su sala desnuda. Mi corazón le sea más columna y mi buena voluntad más horas que las columnas y el oro de las escuelas ricas.
Y, por fin, recuérdame desde la palidez del lienzo de Velázquez, que enseñar y amar intensamente sobre la Tierra es llegar al último día con el lanzazo de Longinos en el costado ardiente de amor


lunes, 8 de septiembre de 2014

¿Te has fijado cómo se consume la vela?

 Da luz, disipa tiniebla, pero a costa de su propia existencia; se va consumiendo, deshaciendo, desapareciendo... Cuanto más luz da, menos le queda para ella.
Y cuando ya no puede ser  útil, deja de existir.
Así tenemos que ser nosotros: debemos dar luz a costa de nuestra muerte total.
Este ha de ser nuestro programa de vida: dar la felicidad a los otros, aunque ello suponga que nosotros nos deshacemos y desaparecemos.
Cuando la madre da la vida a su hijo, pierde algo de sí; pero ella no desaparece del todo; queda en su propio hijo; en su hijo cobra nueva vida, más joven, más llena de posibilidades.
Es hermoso llegar al final de la vida teniendo conciencia de que nos hemos consumido por el bien de los demás.
Que tengas un día brillante.  




sábado, 6 de septiembre de 2014

Oración: Padre Nuestro.

Acompañamos a las jóvenes de camino, retiro espiritual. 

El Padre nuestro es la oración que Jesús nos enseñó para dirigirnos a nuestro Padre, es  una oración de confianza en la que le expresamos nuestro amor; le pedimos por nuestras necesidades y le prometemos perdonar a los que nos ofenden, esperando que Él nos perdone cuando caemos en algún error. Le pedimos su ayuda para que no nos permita caer en el mal y ceder ante las tentaciones de hacer cosas que no son correctas. La palabra Amén significa: “ Así sea”.Con ella expresamos la confianza que tenemos en Él y el compromiso que adquirimos de cumplir lo que prometemos: perdonar y hacer lo posible por no pecar.Ora un Padre nuestro diariamente, hazlo de corazón, medita en el compromiso que adquieres, en cómo puedes realizarlo con tus padres, tus hermanos, tus abuelos, tus parientes, tus amigos, tus maestros, tus vecinos, entre otros. 

Padre nuestro
Que estás en el cielo,
Santificado sea tu nombre.
Venga a nosotros tu reino 
Hágase tu voluntad,
En la tierra como en el cielo
El pan nuestro de cada día
Danos hoy y perdona nuestras ofensas
Como nosotros perdonamos 
A los que nos ofenden.
No nos dejes caer en tentación, 
Líbranos del mal. 
Amén.